RESEÑA
HISTÓRICA
La zona en
que se halla el partido de San Andrés de Giles
se denominó, desde los comienzos de la colonización
"Pago de Areco " por ser las tierras que
abarcan la cuenca del Río de Areco. Allí
se otorgaron numerosas mercedes reales desde comienzos
del siglo XVII, habiendo sido favorecidos, entre otros,
los siguientes propietarios: Sebastián de Orduna
en 1635, Rodrigo Ponce de León en igual año,
Pedro Asencio de Basabe en 1636 y Antonio Gómez
de Saravia al año siguiente, vale decir 1637.
Otra merced fue concedida, en fecha
no documentada, a Pedro de Giles, el que contrajo
matrimonio con Paula Remón en 1639, falleciendo
en 1657; el matrimonio tuvo varios hijos que heredaron
las tierras, el tercero de éstos, llamado Pedro
de Giles y Remón, nacido en 1651, se casó
con Francisca de Sosa. Sus tierras se hallaban sobre
la margen derecha del Río de Areco y se extendían
hacia el sur a lo largo de un pequeño afluente
llamado "Cañada de Giles".
Del matrimonio Giles - Sosa nació una única
hija, Rosa de Giles y Sosa, Quien fue heredera universal
de sus padres, y se casó con el General José
Luis Arellano en 1699 y falleció sin tener
hijos. Dos años mas tarde Arellano, siendo
heredero de Rosa, contrajo nuevo matrimonio con una
sobrina de ésta, llamada María Teodora
de Suero y Giles.
Arellano falleció en 1752 sin dejar descendencia,
de modo que lo heredó su esposa María
Teodora. Esta donó a su hermano Juan Francisco
de Suero y Giles, en 1755, una parte de los campos
adyacentes a la Cañada de Giles. Este Juan
Francisco comenzó pronto a vender lotes de
su propiedad, pero la falta de precisión en
la delimitación de las propiedades vendidas,
dio origen a un largo pleito entre uno de los compradores
y otros vecinos.
En el transcurso de estas actuaciones Juan Francisco
acordó con Pedro Díaz de Vibar, otro
terrateniente de la zona, efectuar la mensura de sus
respectivas propiedades. Fue al realizar esta operación
que Suero llegó a un lugar situado a cinco
leguas de San Antonio de Areco, donde la Cañada
de Giles se cruza con "el camino que llaman de
Mendoza por donde transitan las tropas". Era
el 8 de octubre de 1793.
Allí fue donde Suero resolvió "donar
seiscientas varas de tierras con los fondos correspondientes
al Niño Jesús y San José para
que en dicho terreno se formase una capilla, y presente
el Cura y Vicario Don Vicente Piñero, admitió
dicha donación..."
Pocos meses después de recibir la donación
del terreno, el cura Piñero solicitó
a la curia Obispal de Buenos Aires el permiso para
edificar una Capilla, mediante una nota presentada
el 10 de febrero de 1794. Los trámites quedaron
suspendidos durante varios años a causa de
un nuevo pleito que se entabló por la propiedad
del terreno donado. En 1797 la donación fue
ratificada por la parte demandante y el Cura Piñero
reiteró el pedido que había formulado
en 1794. La Curia dictaminó favorablemente
el 6 de octubre de 1800, y el Virrey Marques de Avilés
dio la autorización el 17 del mismo mes. Entonces
Piñero puso manos a la obra. Delineó
sobre el campo las manzanas de cien varas de lado
y comenzó a vender lotes "cuyos compradores
apenas hacían en ellos un ranchito y lo restante
del terreno lo poblaban de árboles de durazno
y lo cercaban de tunas".
Estas ventas permitieron reunir los fondos con los
cuales el Cura pudo encarar la construcción
del oratorio, con "paredes de barro crudo, techo
de teja, de ocho varas de largo y cinco y media de
ancho, con una muy pequeña sacristía:
en él se colocó por Patrón a
San Andrés Apóstol y se celebró
la primera misa el 30 de noviembre de 1806".
Así quedó fundado el pueblo.
Tratándose de las tierras situadas sobre las
márgenes de la ''Cañada de Giles"
que se llamaba así por el apellido de los primeros
propietarios, era lógico que la nueva población
se llamara también "Giles". Pero
era menos lógico que, habiéndose efectuado
la donación del terreno "al Niño
Jesús y San José", se adoptara
el nombre de San Andrés.
La explicación mas aceptada es que la construcción
del oratorio estuvo terminada a fines de noviembre
y se eligió el último domingo de ese
mes para la inauguración. Era el domingo 30,
festividad de San Andrés Apóstol. El
cura Piñero bautizó al naciente pueblo
con el nombre del Santo del día, haciendo caso
omiso de la voluntad expresada por el donante trece
años antes.
El 30 de julio de 1814. un grupo de vecinos encabezados
por Don Mariano del Rosario Galeano, elevó
a la Curia Obispal un petitorio solicitando separar
el nuevo oratorio del Curato de Areco. pero ante la
negativa del Párroco de Areco, el Obispo denegó
la separación.
La autoridad civil de la zona era el Cabildo de Luján,
el cual efectuó la designación del primer
Alcalde de Hermandad para San Andrés de Giles
el 4 de enero de 1821. en la persona de José
Dámaso Flores, quien se excusó por enfermedad.
También lo hicieron José Romero y Juan
Pablo Rodríguez, hasta que lo aceptó
Carlos Casco, quien fue nombrado el 20 de marzo de
1821.
Los vecinos reiniciaron en 1823 sus gestiones para
obtenerla independencia parroquial, y luego de largos
trámites, lograron la creación de una
Ayudantía de Parroquia en 1827, y posteriormente
la separación definitiva con la erección
del Curato, el 29 de noviembre de 1830.
Aunque Giles era mencionado
como partido desde 1821, la creación oficial
como tal tuvo lugar en enero de 1832, fecha en que
el Gobierno de Buenos Aires dictó el decreto
de designación de 32 jueces de paz en la campana.
El último de la nómina fue Juan Gregorio
Carrasco, nombrado Juez de Paz de San Andrés
de Giles. De esta forma el partido tuvo existencia
de hecho y de derecho, con sus autoridades civil y
eclesiástica constituidas.
A partir del 21 de febrero de 1832, el Juez de Paz
de Giles enviaba al gobierno central un informe bimestral
detallado, con temario fijo, sobre todos los acontecimientos
del lugar. Poco a poco se fue acentuando la fiscalización
que el juez ejercía sobre la población,
tanto en materia económica como política,
según los intereses del gobierno central.
La acumulación de poderes en manos del Juez
provocaba roces y altercados con el otro personaje
que también detentaba influencias en el pueblo;
era la autoridad eclesiástica. Además
de disponer que las multas cobradas fueran entregadas
al Párroco, el 18 de junio de 1832 el gobierno
designó una "Comisión para la reparación
y aseo del templo" integrada por vecinos distinguidos.
El 6 de diciembre de 1841 se inauguró un nuevo
templo en reemplazo del primitivo oratorio. Los festejos
de ese día fueron presididos por "un crecido
número de señores Federales" y
la multitud "celebró con entusiasmo patriótico
Federal las glorias de la Federación".
También se inauguró un nuevo cementerio
el 28 de mayo de 1849, obra que se realizó
a iniciativa del Cura y con el apoyo de autoridades
y vecinos.
A
la caída de Rosas fue destituido Pedro Antonio
Rodríguez, el Juez de Paz que había
ejercido el cargo en forma casi ininterrumpida desde
1834, siendo'' designado en su reemplazo Don Hermenegildo
Saraví, el 8 de febrero de 1852. Este renunció
enseguida y se designó a Pascual Rodríguez.
Pero el Juzgado siguió funcionando regularmente
y sin mayores variantes.
Pero al año siguiente, el 1° de marzo de
1853, volvió a ser designado el propio Pedro
Antonio Rodríguez, quien actuó durante
cuatro meses.
La enseñanza primaria oficial de varones comenzó
a inaugurarse la escuela de primeras letras el 30
de abril de 1854, con 16 niños, actuando como
preceptor don Patricio Castro "con un sueldo
de 500 pesos mensuales que serán pagados por
el gobierno hasta tanto la suscripción de ese
vecindario se organice de modo regular."
En cuanto a la enseñanza de niñas, siguió
aplicando el Decreto del 26 de abril de 1826, conforme
al cual esta actividad docente estaba a cargo de la
Sociedad de Beneficencia. La iniciación de
las clases se efectuó el mismo día que
la de varones y la primera preceptora fue Eusebia
Almada, quien se retiró prontamente, la reemplazó
Teodora Ferreyra., a su vez sustituida por Avelina
Guaux, en setiembre de 1858.
La enseñanza primaria
se fue extendiendo en la medida de los requerimientos
de la población. En 1910 se inauguró
un gran edificio para la Escuela Común No 1,
que sigue utilizándose actualmente.
Hoy el Partido cuenta con 24 escuelas primarias y
9 jardines de infantes.
En agosto de 1858 el Juez de Paz solicitó autorización
para construir un nuevo templo parroquial, ya que
el anterior, tras 20 años de uso, resultaba
pequeño y amenazaba ruina. Éste proyecto,
tras numerosas vicisitudes, y largos trámites,
se concluyó en marzo de 1864 y se inauguró
el 25 de Mayo siguiente, siendo el tercer templo en
Giles desde la fundación.
Por decreto de 24 de febrero de 1865 se fijaron los
limites del Partido, se concluyo el templo parroquial
y se inauguró el 1865 la escuela común
mixta. En agosto de 1866 se comenzó a construir
el edificio municipal, que se inauguró el 30
de noviembre de 1867. En 1872 se construyó
un nuevo cementerio, que sería el tercero desde
la fundación. En 1873 se inició el alumbrado
público a querosene, que hasta entonces y desde
una década antes era a vela de sebo. En 1876
se habilitó la segunda plaza pública
urbana, con el nombre de "Plaza Colón".
En 1877 comenzaron a instalarse los alambrados en
los campos y el 25 de septiembre de ese mismo año
se inauguró una línea del telégrafo
provincial.
En 1884 se inauguró la primera entidad bancaria,
que era una sucursal del Banco de la Provincia. Funcionó
hasta 1893, año en que fue clausurada al quebrar
dicho banco. La apertura se produjo recién
en 1909.
También en 1884 se construyó la Capilla
de Nuestra Señora del Monte Novi en un barrio
apartado del pueblo, a iniciativa de los vecinos italianos
del lugar. Era el segundo templo en el Partido, y
sigue actualmente en uso.
Uno de los acontecimientos salientes fue la inauguración
del servicio ferroviario entre la Capital Federal
y la Estación Giles, que tuvo lugar el 24 de
mayo de 1889. Este servicio estaba a cargo del "Tranway
Rural" con tracción a sangre. de la Empresa
Federico Lacroze. En 1891 se autorizó el uso
de locomotoras ab vapor y la empresa se llamó
"Ferrocarril Rural de la Provincia de Buenos
Aires". Desde 1890 tuvo el nombre de "Ferrocarril
Central de Buenos Aires", y al nacionalizarse,
se denominó "Ferrocarril General Urquiza".
El partido había contado desde 1880 con otra
línea, la del "Ferrocarril del Pergamino",
que no tocaba la localidad cabecera; pasaba por la
estación Azcuénaga, distante unos 10
km.
En 1886 apareció el primer periódico
local, titulado "El Censor", y en 1888 se
inauguró la encina del Registro Civil.
A mediados de 1900 un grupo de docentes fundó
la Biblioteca Popular Alberdi, que funcionó
hasta 1927 en la Escuela Común No 1. En ese
año, tras obtener la personería jurídica,
adquirió un local propio que fue inaugurado
el 30 de noviembre del mismo, en ocasión de
celebrarse el centenario de la creación de
al Ayudantía de Parroquia. La biblioteca sigue
hoy funcionando en el mismo local.
En 1902 se inauguró el servicio telefónico
y se creó el Polígono de Tiro Federal
Argentino. El 5 de setiembre de 1905 fue creado el
Hospital de Caridad, que sigue hoy funcionando como
Hospital Municipal. En 1911, al tenderse la línea
ferroviaria de la Compañía General de
Buenos Aires, se inauguraron dos estaciones dentro
del partido, que se denominan Espora y Tuyutí.
En 1907 se inauguró la primera iglesia fuera
del pueblo cabecera, ello ocurrió en la Estación
Azcuénaga. Hacia 1912 se creó una escuela
Normal Popular de jurisdicción provincial,
que funcionó hasta l918, en cuyo lapso se formó
un contingente de maestras que actuó en Giles
durante más de 30 años.
En 1908 comenzó a funcionar" un Matadero
Municipal, y se inauguró una sala de cinematografía
en el local de la Asociación Española
de Socorros Mutuos, donde continúa actualmente.
Al festejarse el Centenario de la Revolución
de Mayo se instalaron monumentos públicos,
se edificó un mercado municipal, un cementerio,
un nuevo edificio para la sucursal bancaria de la
provincia, se fijó una nueva nomenclatura de
las calles urbanas y se construyeron importantes edificios
privados.
En 1927 se habilitó una nueva plaza en la planta
urbana, a la que se dio el nombre de "Plaza Cutillas",
en homenaje a un antiguo vecino. En ese mismo año
la Municipalidad adquirió un predio de 27 hectáreas
donde se instaló un parque que es hoy un importante
centro recreativo y deportivo público.
A fines de 1929 se inició la pavimentación
de un sector y desde entonces hubo varias ampliaciones,
con lo cual la mayor parte de las planta urbana tiene
calles pavimentadas. También se han realizado
trabajos de esta índole en las localidades
menores del partido.
En años recientes se han instalado aguas corrientes,
red de gas natural y cloacas.
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